Qué ver en Toscana
Se dice que cada pueblo de la Toscana es, sin excepción, tan hermoso que recibe la visita de turistas durante todo el año. No es de extrañar que la oferta náutica sea tan diversa y organizada. Si visitas la Toscana en octubre, los campos cobran tonalidades ocres de una belleza singular. Por estas fechas también se realiza la vendimia, por lo que el capitán que amarre en sus costas podrá disfrutar del espectacular ambiente y la gastronomía del lugar, pues también es tiempo de setas y trufas, elementos con los que se realizan muchos de los platos tradicionales de la Toscana. Durante esta estación, las temperaturas mínimas rondan los 12 grados centígrados, las máximas alcanzan unos agradables 22 grados y las precipitaciones no son abundantes.
Los Capitanes que naveguen por el mar Tirreno pueden amarrar su embarcación alguna de las completas marinas que se ubican en la costa y contratar un viaje a Florencia, la cuna del Renacimiento, un destino imperdible por su importancia, cultura y gastronomía. No obstante, la costa en si ya posee bastantes atractivos en forma de largas playas de arena, como en Versilia, o en forma de hermosos acantilados en los que fondear bajo su resguardo.
El capitán no puede dejar de visitar las siete islas del archipiélago Toscano, todas ellas postradas sobre un mar cristalino de hermoso lecho y tildadas con abundante vegetación mediterránea y naturaleza salvaje. De ellas, mención aparte merece la Isla de Elba, la tercera más grande del mediterráneo, por lo que merece varios días de atención.
En Capraia, se encuentran, quizás, los fondos marinos más impresionantes de Italia, albergando numerosos restos arqueológicos y pecios entre los que bucear..
Los Capitanes que naveguen por el mar Tirreno pueden amarrar su embarcación alguna de las completas marinas que se ubican en la costa y contratar un viaje a Florencia, la cuna del Renacimiento, un destino imperdible por su importancia, cultura y gastronomía. No obstante, la costa en si ya posee bastantes atractivos en forma de largas playas de arena, como en Versilia, o en forma de hermosos acantilados en los que fondear bajo su resguardo.
El capitán no puede dejar de visitar las siete islas del archipiélago Toscano, todas ellas postradas sobre un mar cristalino de hermoso lecho y tildadas con abundante vegetación mediterránea y naturaleza salvaje. De ellas, mención aparte merece la Isla de Elba, la tercera más grande del mediterráneo, por lo que merece varios días de atención.
En Capraia, se encuentran, quizás, los fondos marinos más impresionantes de Italia, albergando numerosos restos arqueológicos y pecios entre los que bucear..